Durante la jornada de hoy y la carrera de mañana, estamos atravesando por la mitad del ciclo de carreras, en la Fórmula Uno de 2010. El premio a disputarse en esta ocasión es en Gran Bretaña, dentro del circuito de Silverstone.
El cirucito de Silverstone es muy familiar para los pilotos, aunque no lo es tanto en la competición de este año, ya que éste se ha visto modificado, con el fin de ser adaptado para la competencia de Moto GP.
El reto mayor que los automovilistas deben afrontar, es el tener que lidiar con neumáticos tanto duros, de Potenza, como blandos de Bridgestone, para poder enfrentar el circuito británico, situado en la ciudad de Silverstone.
La pista inglesa es la tercera más larga de todo el calendario de Fórmula Uno, ya que en su reestructuración es 5,90 kilómetros más extensa que antes. Se añidió al trazado una nueva sección interior, además se verse modificadas las curvas ‘Club’ y ‘Chapel’. El renovado circuito de Silverstone fue inaugurado en el mes de abril de este año.
Se espera que esta pista sea una de las más rápidas de todas las que están habilitadas para ser sedes de los ‘Grandes Premios’ de Fórmula Uno.
Como aspira a ser un circuito veloz, el gran desafío lo tendrán que afrontar los equipos que utilicen los neumáticos blandos de Bridgestone, dado que las altas velocidades y fuerzas laterales que provoca el trazado, así como también la elevada temperatura de la superficie de la pista, serán difíciles de atravesar con neumáticos blandos.