A los 33 años de edad, la madrileña Nuria Fernández logró coronarse por primera vez, en el Campeonato Mundial de Atletismo, en la prueba de 1.500 metros. Por su parte, la otra española, Natalia Rodríguez, logra el bronce.
Después de estar «acostumbrada» a ser desplazada a segundo plano, en detrimento de Natalia Rodríguez, Nuria logró una gran carrera, más que nada en el tramo final, donde pudo tomar considerable distancia, con la que se colocó el oro en el cuello.
Después de un año lleno de altibajos para Natalia Rodríguez, además de plagado de dudas, obtuvo un buen resultado, llevándose el bronce. Ambas españolas marchaban en el grupo sobre la pista, desafiando al buen desempeño de la rusa Alminova, una de las favoritas.
En la contrarrecta fue que se definió la disputa, cuando las españolas pudieron remontar del sexto y séptimo puesto. La rusa resistía, mientras Natalia atacaba. Fue ahí que la presencia de la implacable Nuria apareció, demostrando lo que sabe, viéndose cada vez más adelantada, para sorpresa de muchos, incluso de ella misma.
Con ritmo progresivo, Nuria demostró que las cosas funcionan. Esto es lo que a ella le hacía falta: una carrera limpia y rápida, que le permita desplegar sus habilidades. La madrileña pudo sacar provecho de la gran velocidad que Alminova, ya que esta se cansó y sintió el desgaste muscular, mientras que el ritmo constante de Nuria fue el que se llevó el oro.
Como si esto fuera poco, Nuria Fernández logró un nuevo récord personal, marcando un tiempo de 4:00.20. Doble felicidad para ella. Como se suele decir: «los últimos serán los primeros», además de que «no está muerto quien pelea»… ¡Felicitaciones Nuria y Natalia por su gran trabajo!