Esta noche el Camp Nou quiere vivir una de esas exuberantes noches de Champions League en la que todo el equipo carbure y se vean, no ya solo goles, sino fútbol de salón y jugadas trabajadas como la alta cocina de diseño.
El Bayer Leverkusen viene con ánimo de no ser sancionado para la próxima edición ya que no presentarse a un partido tiene esos y otros inconvenientes, aunque seguro que en plena crisis, habrán pensado en los gastos que acarrea traer a un equipo de turismo a Barcelona. Avión, hotel, manutención.
No nos engañemos, los Aspirinas tienen ante sí uno de los mayores retos del fútbol mundial, marcarle tres goles al Barcelona en su campo y no encajar ninguno. El Real Madrid fue allí a intentar esa hombrada y a punto estuvo de conseguirla pero al final el Fútbol Club Barcelona salió airoso.
Un partido de trámite en el que Guardiola tendrá el banquillo nutrido de canteranos. El once titular no, porque con lo prudente que es el hombre, sería como romper la imagen inmaculada de eterno modesto, pero les irá dando entrada en la segunda mitad según se vaya viendo el, previsto de antemano, desenlace del partido.
Diego Celma
Imagen: as