Fue el delantero y estandarte de aquel «Superdepor» que maravilló a los aficionados al fútbol. De aspecto frágil, era un depredador del área y fue el primer jugador en conseguir marcar en una sóla liga al menos un gol a todos los equipos de primera. Llegó a Coruña procedente del Vasco de Gama en 1992 y ya en esa misma temporada se proclamó pichichi de la competición.
Con el Deportivo de la Coruña logró ganar un título de liga, una Copa del Rey y una Supercopa de España. La huella de aquel «Superdepor» todavía está presente en los aficionados del equipo, quienes le recuerdan como a su gran ídolo. Su único «punto negro» como deportivista fue la anecdota que protagonizó en la temporada 93/94, cuando el Deportivo se jugaba la Liga ante el Valencia. El árbitro señaló un penalti a favor del Depor en el último minuto, y en lanzador habitual, Donato, no estaba en el terreno de juego ya que había sido sustiuido, siendo Bebeto el segundo lanzador. Debido a que, había fallado una pena máxima semanas atras, los nervios se apoderaron de él y no fue capaz de lanzar el penalti. Djukic falló el tiro y la liga fue a parar al F.C. Barcelona.
En el total de su carrera en Coruña, marcó un total de 118 en 131 partidos y con la selección brasileña fue campeón del mundo en 1994, de la Copa América y de la Copa Confederaciones.
Os dejamos un vídeo con sus mejores jugadas.