El principio de esta historia, tuvo lugar el pasado 27 de noviembre, cuando una discusión entre Tiger Woods y su mujer acabó en accidente de coche.
Desde ese día, la vida del mejor jugador de golf del mundo es una pesadilla.
Se retiró del golf, acabó pidiendo perdón por sus infidelidades y ayer anunció la vuelta a la competición.
El mundo del golf está a punto de recuperar a su rey, Tiger Woods, oficialmente retirado desde el 12 de diciembre de 2009, para solucionar sus problemas matrimoniales, anunció ayer a través de su página web que está «listo», para regresar a la competición en el Masters de Augusta.
Éste torneo se disputará del 8 al 11 de abril, a lo que el jugador afirmó: «…allí es donde gané mi primer grande. Augusta es donde necesito estar como profesional después de tanto tiempo sin jugar…».
Woods pensó «volver» en los torneos previos a este Masters, principalmente en el campo de Bay Hill, torneo organizado por Arnold Palmer, pero ha preferido descartar esas invitaciones y tomarse más de cuatro meses de retiro, para hacerlo en el campo donde ha ganado cuatro veces (1997, 2001, 2002 y 2005).
Con catorce majors en su bolsa, Woods vuelve para atrapar a Nicklaus, que se retiró con 18 triunfos.
Ahora bien, lo cierto, es que pese a este anuncio, el calvario personal no cesa, y lo reconoce mientras trata de recomponer la relación con Elin Nordegren, su esposa (ya han sido fotografiados juntos): «…llevo recibiendo tratamiento desde hace dos meses. Aunque haya decidido volver todavía tengo mucho trabajo por hacer en mi vida personal…».
Por otra parte, cabe recordar que durante todo este tiempo de inactividad y polémicas, Woods ha tenido varias desilusiones, ya que han sido unos cuantos de sus patrocinadores los que le han abandonado, (Accenture, Gatorade, AT&T, General Motors, Gillette), lo que ha generado unas pérdidas incalculables para todos.