La selección de Uruguay aplacó la gran fiesta que protagonizaba la selección anfitriona con un definido 3 a 0, en el estadio de Pretoria, Tshwane. El jugador del Atlético de Madrid, Diego Forlán, le dio la firma a dos goles, uno chutado desde fuera del área, y el otro de penalti.
Uruguay se mostró sólido a lo largo y a lo ancho del campo, manteniendo en casi todo momento el control del balón, durante las dos mitades del partido. A pesar de ello, Sudáfrica encontró algunos espacios y trató de disminuir la diferencia, pero sin lograrlo.
En el minuto 24 del primer tiempo, Diego Forlán ejecutó un impresionante gol, inaugurando el marcador con un potente disparo que sorprendió a Khune, el portero sudafricano, que fue expulsado en la segunda mitad, porque cometió una agresión al jugador uruguayo Luis Suárez.
Los «Bafana Bafana» buscaron la remontada, cuando aun era posible igualar el partido, pero no lo lograron. En la segunda mitad, cuando el partido era claramente dominado por los «celestes», Khune cometió un penalti, a los diez minutos, que favoreció a los visitantes, con el que, nuevamente, Diego Forlán se coronó. El partido ya se iba definiendo con este 2-0.
Al factor de contar con diez jugadroes, la selección sudafricana añadió el cambio su ritmo, ralentizándolo cada vez más, por lo que llegó el tercer y definitivo gol, para consagrar a los «Charrúas» con la victoria del encuentro.
En los minutos finales, Álvaro «Palito» Pereira hizo un tercer gol, pero Sudáfrica ya había perdido sus energías y esperanzas, incluso desde su afición, que a medida que la derrota se hacía más evidente, se retiró del estadio.
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