Ayer también se jugaba la ida de otra eliminatoria de Cuartos de final, en concreto la que enfrenta al Chelsea y al Benfica. El estadio portugués estaba a rebosar para recibir al conjunto londinense. Sus opciones de pasar estaban relacionadas con sacar un resultado positivo en su campo, pero no fue así.
Al Chelsea también le costó dios y ayuda abrir el marcador y su único gol, el que a la postre le daría la victoria no llegó hasta el minuto 75 gracias a Kalou.
El Chelsea toma ventaja y en Stamford Bridge jugará con la tranquilidad de saber que esta clasificado salvo por una sorprendente victoria del Benfica en la que no creen ni los jugadores lusos.
Roman Abramovich ha fijado sus ojos ya en la final de Munich porque hace muchos años que se le resiste la orejona. Sabe que por medio tendrá de nuevo el Barcelona, aquel equipo que le privó de jugar la final tras el robo más escandaloso de la historia del fútbol desde el España – Corea del mundial 2002. Veremos si este año lo consigue, porque hasta ahora es la viva muestra de que el dinero no da la felicidad.
Diego Celma
Imagen: elcomercio