Sin duda uno de los grandes acontecimientos de este año. Mucha expectación despertada, muchos cambios de plan y ayer, por fin, se produjo. El hombre logró superar la barrera del sonido sin necesidad de propulsion, en caida libre.
El encargado de hacerlo es el, desde ayer, archiconocido austriaco Felix Baumgartner. De la mano de Red Bull, marca organizadora y patrocinadora del evento, este deportista de alto riesgo, antes paracaidista del ejercito austriaco, subió durante 90 minutos en un globo tripulado hasta la estratosfera, para lanzarse al vacío desde una altura de 39.043 metros.
Felix saltó del globo tripulado y comenzó su veloz descenso, que le llevo a alcanzar una velocidad de 1.342 kilómetros por hora en los primeros 40 segundos de caida,logrando asi romper la barrera del sonido, algo que, según el propio Baumgartner, le hizo pensar que «iba a perder el sentido, debido a la violencia de la caida».
Equipado con un paracaidas especial para estabilizar el descenso en caso de problemas, declaró tras el salto que «ha sido mas dificil de lo que todos esperabamos, estás bajo presión, no sientes el aire» pero que no quiso abrir dicho paracaidas porque, a pesar de la violencia y las nuevas condiciones a las que se vio sometido, aseguró que «Desde el punto de vista de la consciencia, siempre he sabido lo que sucedía»
Tras cuatro minutos y 19 segundos de caida, y dejando el record de Joe Kittinger (supervisor del salto y actual recordman con 4´36″), tomo tierra en un aterrizaje perfecto mientras su familia y el resto del equipo respiraban por fin tranquilos y con la satisfación de un trabajo bien hecho.
Os dejamos un par de vídeos de la proeza.