En el torneo de 2009, fueron los irlandeses que gritaron tanto “¡Go Ireland!”, que su equipo acabó campeón del torneo de Rugby de las 6 Naciones.
Lo cierto, es que a partir del 6 de febrero hasta el 20 de marzo, sus jugadores, juntos con los de Inglaterra, Francia, País de Gales, Italia y Escocia, vuelven a machacar el césped del estadio y ensuciar sus shorts blancos y cortos.
Curioso es el hecho de que mucha gente quedará para ver a los partidos de este Torneo de Rugby, con cervezas en un bar, en casa, o en el mismo sitio de la acción, ahora lo fascinante es que aunque no conozcas las reglas de este deporte, seguro que te quedarás atrapado por los momentos de suspenso o algún amigo te revelará algunas de las principales del rugby.
Una de las noticias desalentadoras concierne al equipo francés: el jugador Julien Dupuy no podrá jugar con los suyos en este evento, que será el más importante de Europa, porque entró en contacto con los ojos o la zona de los ojos de Stephen Ferris, el jugador de tercera línea del Ulster, durante la Heineken Cup en diciembre. (algo prohibido en este deporte). Así, no podrá volver a jugar hasta el 27 de mayo…
El trofeo, que se otorga al equipo campeón, es una copa hecha de más de cinco kilos de plata sterling y su volumen puede contener exactamente cinco botellas de champagne – una para cada nación – con un borde especialmente concebido para beber sin problema.
La realidad, es que al principio su interior era de plata, pero el champagne le ha hecho tanto daño que se tapó con una capa de oro 22 quilates para protegerla.
Ahora bien, hablando del torneo de 2010 se presenta con un candidato favorito, y es que Francia tiene prácticamente en sus manos en trofeo del Seis Naciones de rugby al conseguir su cuarta victoria consecutiva, aplastó a Italia en París (46-20) y se queda a un paso del «Grand Slam», título que se jugará el próximo sábado en el Stade de France ante Inglaterra.
Ganar la clasificación del torneo más antiguo del mundo tiene una importancia clave.
En esta competición lo que cuenta es llevarse el «Grand Slam», este título sólo consigue el que acaba sin una derrota.
Con respecto a los franceses, no tuvieron mayores problemas para pasar por encima de los transalpinos y en el minuto 16 ya habían solucionado el choque con el segundo ensayo y un 17-0. Gonzalo García vio la tarjeta amarilla en el 14 y dejó a Italia con uno menos.