Después del encuentro del lunes, entre el Real Madrid y Espanyol por la cuarta jornada de la Liga española, el entrenador merengue José Mourinho volvió a opinar sobre la actuación de su equipo, siendo muy claro y contundente con sus palabras. El portugués suele ser así en todas sus declaraciones y esta no fue la excepción.
La reflexión final que ‘Mou’ extrajo tras el encuentro fue que «…en función de las circunstancias me voy satisfecho porque no es fácil jugar en un campo de patatas. Además hay muy poco tiempo para recuperar entre partido y partido y jugamos ante un adversario que no tiene nada que perder…».
Durante el partido y a partir de las expulsiones, Mourinho tuvo que reaccionar y realizar cambios. La decisión tomada fue la de sacar del campo a los «malabaristas» Di María y Özil, para dar entrada a Khedira y a Arbeloa, de manera tal que en el centro quedaran formados Xabi Alonso, Khedira y Lass.
Sobre estos cambios se le preguntó al luso, quien respondió de esta forma: «…Nací en un país con 10 millones de entrenadores. Trabajo en un país que tiene 40 millones de entrenadores. Pero la realidad es sólo una: el Madrid tiene un entrenador y sólo uno puede decidir. Mi equipo estaba cansado, poco compacto y perdiendo el control. De ahí vinieron los cambios…». Aquí también se destaca la contundencia del entrenador blanco, con cada palabra que pronuncia.
Podrá gustar o no gustar, pero lo cierto es que a este técnico, acostumbrado a los triunfos, no se le puede negar la sinceridad y frontalidad sobre lo que declara, pese a quien le pese.
¿Qué opinas de las palabras de Mourinho? Deja tu comentario.