El conjunto de Ancelotti destrozó al Schalke, que sirvió de víctima perfecta para romper la maldición alemana que había acompañado al Madrid durante más de 10 años.
La conexión entre los tres delanteros resultó más devastadora que nunca y ambos se repartieron los goles a partes iguales, con una exhibición en ataque que demostró que el Real Madrid posee, posiblemente, la mejor delantera del mundo.
Además, el resto del engranaje del equipo funcionó a la perfección, con un centro del campo que marcó los tiempos del encuentro y una sólida defensa que permitió que Casillas solo encajara el golazo de Huntelaar.
En el minuto 13 llegó la primera conexión de la BBC. Bale combinó con Cristiano en la frontal para que el portugués, de tacón y con la colaboración del defensa, dejara la pelota en bandeja a Benzema que batió al portero con un gran remate. Corría el minuto 13 y el Madrid espantaba los fantasmas de Alemania. El segundo gol llegó en el 21, después de una gran jugada individual de Bale que el galés culminó con un remate ajustado al palo. Cristiano tuvo alguna ocasión de abrir su marcador personal, pero la suerte y el guardameta alemán lo impidieron. Sin embargo, tras la reanudación, el de Madeira encaró a Matip y tras sentarlo con una bicicleta superó a Fhrmann con un potente disparo. Benzema dio comienzo a la segunda ronda de goles en el 57, después de una gran combinación con CR que el francés remató a gol tras burlar de nuevo a Fhrmann. El quinto sería obra otra vez de Bale. Ramos se vistió de Laudrup y pasó la pelota al Galés mirando al tendido para que el jugador de los 100 millones la pusiera lejos del alcance del portero. El sexto y definitivo lo anotó «el bicho» tras un pase de Benzema, lo que le permitió adelantar a Ibrahimovic como máximo artillero de la competición.
Huntelaar marcó el gol de la honrilla en el tiempo de descuento con un remate ante el que nada pudo hacer Casillas.
El Madrid rompe la maldición germana y lo hace dejando sentenciada la eliminatoria tras un partido casi perfecto.