Durante su entrenamiento en la Nueva Codomina, la selección de España convocó a unos cuantos aficionados (unos 10.000, aproximadamente), en la localidad donde hoy mide fuerzas contra Polonia, en lo que será su último partido amistoso de cara al Mundial, que dará comienzo el próximo viernes. Los numerosos seguidores de la «Roja» animaron a sus ídolos, pero acabaron poniendo en riesgo la seguridad.
La pasión excesiva de la afición, generó que el entrenamiento fuese más corto que en las demás oportunidades. Vicente Del Bosque, a los cincuenta minutos de preparación, presentó a los once que tiene en mente para enfrentar a Polonia.
Debido a que no les fue permitido acceder, los seguidores de la selección comenzaron a saltar las vallas, atentando contra la seguridad de los mas pequeños que asistieron al evento, para poder ver un partido que los jugadores «ensayaron» a mitad de campo. Los que lograron acceder a la práctica, fueron retirados por la policía.
En lo que respecta al equipo, Del Bosque probó la formación de un equipo compuesto por Iker Casillas, Álvaro Arbeloa, Gerard Piqué, Carles Puyol, Capdevila, Sergio Busquets, Xabi Alonso, Xavi, Andrés Iniesta, Silva y Villa. El entrenador aseguró que dará descanso a Sergio Ramos, el único internacional junto a Andrés Iniesta, que ha sido titular en los dos amistosos anteriores.
A esta cita de entrenamiento sí concurrió Fernando Torres, con su rodilla derecha que hace poco fue operada, protegida. Los doctores han valorado de forma positiva el entrenamiento del «niño» Torres y afirmaron que podrá jugar el encuentro ante Polonia.
El entrenamiento culminó con un saludo de los jugadores hacia su afición, agradeciendo el apoyo. Desde el centro del campo, jugadores como Sergio Ramos, Jesús Navas y Sergio Busquets regalaron balones.