Las conocidas animadoras ucranianas de la FIBA, las cuales son denominadas «Red Foxes», no podrán brindar su actuación al público en los partidos que dispute la selección de baloncesto de Turquía, debido a que sus trajes y rutinas resultan ofensivas contra la ley islámica, a partir de la cual, las mujeres tienen prohibido exhibir su cuerpo en público.
Se debe dejar en claro que esta medida sólo tiene efecto para los partidos que la selección anfitriona tenga que enfrentar. Además, en los encuentros que dispute Irán, las «cheerleaders» vestirán mallas negras y camisetas de color blanco, con las cuales se ocultará la mayor parte de su piel.
Algunas quejas se han hecho escuchar, por parte de las autoridades iraníes, quienes durante el partido que midió a Estados Unidos con su selección se voltearon de espaldas al espectáculos de las «Red Foxes», horrorizados y conmocionados.
Voces del gobierno turco han dicho que «…mientras nuestra selección nacional de baloncesto gana cada uno de sus partidos en Ankara, no se permiten animadoras debido a la posibilidad de que el primer ministro Tayyip Erdogan y su esposa, quien usa el pañuelo musulmán, asistan al partido…».
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