El entrenador del FC Barcelona, Pep Guardiola, ha asegurado que todavía está “esperando” la riña de algún español, tras haber apoyado la candidatura de Qatar, para ser sede del Mundial 2022. El motivo por el cual el técnico ha demostrado su aceptación a la propuesta, es que vivió “allí dos años”.
A este respecto, Guardiola señaló que “todos tienen sus puntos fuertes y débiles, pero creo que es un bueno momento para que el mundo conozca Qatar. Es un país que puede organizarlo”. En sus tiempos de jugador, Pep militó en el Al-Ahly. Estas palabras del entrenador del Barça tuvieron como contexto una de las reuniones de líderes de fútbol, que tuvo lugar la pasada semana en la ciudad de Londres.
“Todavía espero alguna riña por apoyar a la candidatura de Qatar…”, dijo el barcelonista, y en el caso de que la candidatura de España para albergar al Mundial 2018 se viera frustrada y siguiese luchando por ella para 2022, aseguró que “entonces renunciaré y me iré a casa”.
Con respecto a las opciones que posee la propuesta conjunta entre España y Portugal, la cual se someterá, junto a las otras candidaturas europeas, a la decisión de la FIFA, el próximo 2 de diciembre, el entrenador culé destacó que “tienen un gran competidor, como Inglaterra, aunque todas las candidaturas son buenas llegadas a este punto”. Añadió que “ojala se les pueda ganar».
Todas tienen sus puntos para defender, pero, por suerte, no tengo que decidir quién va a ganar”.
Cabe destacar que Guardiola viajó a la capital inglesa con el único fin de dar respaldo a la candidatura de Qatar, exponiendo sus argumentos que se centraron, por un lado en las ventajas de que este país sea sede mundialista: Gracias a la escasa distancia que existe entre los diferentes estadios qataríes, es como si “todo [estuviera] en el mismo sitio”.
Finalmente, sentenció que: “…El fútbol es de todos, pertenece a todo el mundo. El fútbol ha ido a todas partes menos a Oriente Medio. Por tanto, es buen momento para que les toque…”, concluyendo de esta forma sus motivos para defender a Qatar.
Sería una buena propuesta para el 2022, y serviría como proyecto globalizador para la FIFA. Podría ser una buena excusa para un completo intercambio cultural, que ya empezó con el continente africano, este año, más precisamente en Sudáfrica. Lo único que esperamos es que España sea elegida para el 2018, así ambos países no tendrán que competir.
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