Todos le han señalado a él, todos le han apuntado con el dedo y el designado para perpetuar este proyecto de superbarça es Tito Vilanova, el que ha sido el segundo de Guardiola todos estos años.
Tito Vilanova es conocido mundialmente porque José Mourinho le metió un dedo en el ojo, únicamente por esto, y lo que quiero decir con esto es que tiene muy poca experiencia dirigiendo equipos.
Ahora le cae una patata caliente, en la que mientras Xavi y Puyol sucumben, Pique anda enrarecido y Messi es el único que sostiene las victorias de su equipo, dependiente más que nunca de sus goles. Tiene la difícil o imposible misión de emular al gran Pep Guardiola y enfrente tiene a un Real Madrid entrenado por José Mourinho que crece cada año a ritmo vertiginoso. Las cosas no pintan muy bien, porque se esperaba a un técnico con más caché.
Con esta última noticia se han confirmado los peores 10 días de la historia del barcelonismo reciente que han tenido la dura eliminación de la Champions League, la derrota en casa contra el Madrid, una derrota que les ha costado una liga, y la decisión final de Guardiola de no renovar. ¿Cambio de ciclo?
Diego Celma
Imagen: europapress