Ayer Alemania estaba huérfana porque Mario Gómez no estaba disponible para jugar durante todo el encuentro. Así que le tocaba el turno al veterano y siempre cumplidor Miroslav Klose.
A la Alemania de Joachim Low, no tan eficiente como la Alemania de Angela Merkel, le costó ayer abrir la lata helena y hasta el minuto 39, en los albores del descanso, los teutones no fueron capaces de marcar. Fue un defensa, Philip Lahm, y esto sirvió para irse al descanso con una incómoda aunque válida ventaja.
Tras el paso por la caseta, Giorgios Samaras marcó un gol que sorprendió a toda Europa porque Grecia empataba así la eliminatoria con Alemania. Pero poco duró el gozo heleno; en el minuto 61, Sami Khedira marcó el gol de Alemania y tan solo 7 minutos después, Miroslav Klose ponía tierra de por medio.
Todavía quedaba mucho partido y habría que vivir varias emociones más, como el cuarto gol de Alemania, obra de Reus tras un derechazo desproporcionado a puerta vacía que casi se le va al cuarto anfiteatro. En el último minuto del partido, Salpingidis marcó de penalti un gol que maquillaba la derrota de los griegos. Alemania ya espera a ingleses o italianos.
Diego Celma
Imagen: observadorglobal