Con los partidos disputados durante la jornada de ayer se dio por concluida la fase de grupos de la Champions League, y el próximo lunes se sabrán los emparejamientos de los octavos de final.
El martes era el turno del Real Madrid que, ya clasificado, se enfrentaba al Copenhague en el Parken Stadion, donde hasta el momento ningún equipo había conseguido doblegar a los daneses en una fase de grupos. Los de Ancelotti realizaron un partido muy serio que además sirvió para batir algún que otro record y anotar el gol número 800 del conjunto merengue en la Champions, obra de Cristiano Ronaldo, que cuajó una gran actuación tras haber estado lesionado. La defensa blanca continúa muy sólida y ya encadenan tres encuentros sin recibir gol. El Madrid se planta en octavos en un excelente estado de forma y más de un aficionado ya ve más cerca el sueño de la décima.
En la jornada del martes también le tocaba a la Real Sociedad, que se despidió dando una mala imagen, tanto en su juego como en el comportamiento de alguno de sus jugadores que, con el marcador en contra, realizaron duras entradas a los jugadores del Leverkusen. La experiencia ha sido bonita pero el equipo ha demostrado no estar todavía al nivel que la competición exige.
Ayer les tocaba a Barcelona y Atlético de Madrid entrar en escena, y ambos equipos, con los deberes ya hechos, sellaron sus encuentros con victoria. En la ciudad condal el F.C. Barcelona recibía un Celtic ya eliminado pero que sirvió de víctima para que Neymar se diera su gran homenaje de la temporada. El brasileño, que todavía no había marcado en la Champions, se dio un festín de goles y anotó un hat-trick tras realizar una expectacular actuación, aunque un poquito individualista en algunas ocasiones. Los de Martino recuperaron el buen juego de antaño y el Camp Nou vivió una noche de fiesta con los seis goles anotados por los suyos.
Los de Simeone terminaron la fase de grupos de manera casi impecable y se confirma como un serio candidato a dar la sorpresa este año en la competición. El Cholo ha conseguido hacer un equipo muy compacto y sobre todo muy trabajador. Les ha imprimido su carácter y representan lo que el argentino fue sobre el césped como jugador. Ayer vencieron por 2-0 al Oporto sin desplegar su mejor juego, pero aprovechando las ocasiones que tuvieron, muy al contrario que su rival, que falló un penalti y estrelló el esférico contra el palo hasta en cuatro ocasiones. El Atlético suma 16 de 18 puntos posibles y partirá en el bombo 1 como cabeza de grupo.