El Real Madrid olvidó el mal juego mostrado en los últimos partidos de liga y ayer goleó al Borussia Dortmund, dejando practicamente sentenciado su pase a semifinales de la Champions League.
Mucha culpa del plácido partido que vivieron ayer los de Ancelotti lo tiene el tempranero gol de Bale, que abrió el marcador cuando solo se llevaban tres minutos de juego. El galés recibió el balón de Carvajal y batió al guardameta alemán con un sutil toque con la puntera que ponía en ventaja el conjunto blanco. Cristiano Ronaldo tuvo el segundo en sus botas, pero Weidenfeller se estiró para desviar el libre directo del portugués. Cuando se llegaba a la media hora de juego, Isco puso el segundo en el marcador tras un gran disparo pegado al palo que hacía inútil la estirada de Weidenfeller. El jugador español se adaptó bien a la posición asignada por el técnico italiano y cuajó un buen encuentro.
Con el 2-0 y una nueva ocasión de Bale en el lanzamiento de una falta se llegó al descanso, y tras la reanudación el Madrid salió a morder buscando la sentencia. Bale primero y Benzema después tuvieron la ocasión de ampliar la ventaja, pero la defensa alemana se empleó con eficacia. Sin embargo la zaga del Dortmund no fue capaz de evitar el tercero, que llegó en el minuto 57. Modric robó el esférico en una salida de los de Klopp y lo cedió a Cristiano Ronaldo que definió con una gran elegancia ante la salida de Weidenfeller.
En la recta final del encuentro el Borussia tuvo alguna ocasión para maquillar el resultado, pero Pepe, uno de los mejores ayer, estaba ahí para evitarlo. Cristiano Ronaldo se retiró lesionado, aunque en principio parece que no es nada grave y estará disponible para este tramo crucial de la temporada.
El Madrid ansía la décima y ayer el objetivo quedó un poco más cerca.